ESTO NO ES UN ADIÓS, SINO UN HASTA LUEGO. GRACIAS CAPITÁN

Como él mismo dijo en su discurso, “esto no es un adiós, porque sé que volveré”. Vicente Iborra lo tiene claro, quiere volver al Ramón Sánchez-Pizjuán. Y así lo hizo saber el futbolista, uno de los más queridos, no sólo por el sevillismo, sino por sus propios compañeros de equipo, que no dejaron pasar la oportunidad de arroparlo en un trago tan difícil como es el de despedirse de la que ha sido su casa durante cuatro temporadas.

Junto a él estuvieron Carriço, Nico Pareja, Krohn-Dehli, Sergio Escudero, Sarabia, Sergio Rico, David Soria, Lenglet, Ben Yedder, Juan Muñoz, Franco Vázquez y Mariano; además del ex sevillista y canterano Luismi.

No faltó representación del actual cuerpo técnico de la primera plantilla, así como del Consejo de Administración con la presencia, no sólo del vicepresidente primero José María del Nido Carrasco, sino además del consejero José Luis Moscoso y del propio presidente, José Castro, que no pudo estar en persona pero sí quiso enviar un mensaje al jugador, a través de un vídeo, de agradecimiento y orgullo por haber defendido con honor el escudo nervionense. Óscar Arias, director técnico de la Entidad, tampoco faltó a una cita a la que Vicente acudió acompañado por su mujer y sus dos hijos, el mayor en brazos de Nico Pareja durante todo el acto.

Y ante las tres copas de la UEL conquistadas por el valenciano, Vicente Iborra no pudo contener las lágrimas. Se va de la que ha sido su casa durante cuatro temporadas y en la que deja, como él mismo afirmó, amigos para toda la vida. Por ello, Vicente, el sevillismo sabe que esto no es un adiós, sino un hasta luego. Sevillismo que tampoco faltó a la cita y del que también se despidió el futbolista bajo el Mosaico de Preferencia, donde le esperaban un centenar de personas.

Gracias por todo capitán.